"La luz", de Coriolano González - Ediciones Idea (Santa Cruz de Tenerife, 2010)

[Luis Corrales]

A finales del pasado año, nuestro amigo canario Coriolano González Montañez, una vez asiduo de la vieja Pizarra de estas páginas bajo el seudónimo de Guillermo Fontes, ha visto publicado el libro de haikus La luz en Ediciones Idea, colección Atlántica. La página de la editorial es http://www.edicionesidea.com , aunque el libro aún no aparece listado.

Se trata de una edición sencilla pero muy conseguida, con un haiku por página, y un poemario que se estructura en tres partes con los siguientes títulos: "El acantilado y la platanera", "En este lugar de desgarro" y "Albor". La central se compone de poemas que siguen la pauta del tanka, y se inspiran, digamos, en la tradición occidental, mientras que la primera y la última constan de viejos y nuevos haikus del autor. Coriolano González es un maestro del haiku sensorial, del haiku que casi puede olerse, comerse, oírse. Abunda, desde su propio estilo, en la senda de otros autores como el colombiano Fernando López Rodríguez o el dominicano Rafael García Bidó. No es ninguna coincidencia que todos ellos estén radicados en latitudes tropicales.

Os dejo con una pequeña selección de los haikus del libro. Los amigos que lleven ya algún tiempo en El Rincón del Haiku reconocerán algunas de las obras maestras que han visto la luz desde nuestras páginas a lo largo de estos años. En cualquier caso, espero que disfrutéis del mosaico de sensaciones que nos propone el autor.

Un saludo,

Luis



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sobre la arena
cuatro huellas de pies:
dos son de niño




el perenquén
y el olor de los plátanos
tras el crepúsculo




solo la noche
y aquel aroma a guano:
risa de niños




viento de otoño
un cernícalo caza
contracorriente




entre la lluvia
las hojas del castaño:
atardecer




tarde en silencio:
en el acantilado
el mar de nubes




valle de almendros:
un zumbido de abejas
en lontananza




una pardela:
en el acantilado
un eco un eco




este mosquito
en mi vaso de vino:
no bebo solo




sobre la mesa
la ropa ya planchada:
huele a café




acompasados
padre e hijo respiran:
noche de invierno




cojo una piedra
y la lanzo muy lejos:
es media tarde




una andoriña
durante la tormenta
en mi ventana




sube a la flor
solamente una hormiga
y luego vuela





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