Sobre Artaud y el teatro (experimento de haibun-microzuihistsu)

[JL.Vicent]

“El teatro actual está en declive porque por un lado ha perdido cualquier sentido de la seriedad y por el otro el de la risa. Porque se ha alejado de la solemnidad, de lo directo, de la hiriente efectividad- en una palabra del Peligro. Por ello ha perdido el verdadero sentido del humor, y el poder anárquico, físico y disolvente de la risa. Porque se ha alejado del profundamente anárquico espíritu que constituye la base de toda poética.”


(Sicum dixit Antonin Artaud)


"Quisiera hacer un libro que perturbe, que sea como una puerta abierta con acceso a un lugar al que nadie hubiera consentido en ir; una puerta simplemente conectada con la realidad."


Acaso sólo pueda uno distinguir dos clases de realidad (ambas reductoras por inabarcables); aquella que los grandes místicos han balbuceado al intentar hablar sobre lo inefable, y esa clase de realidad (en sentido kantiano) que sólo el ser humano construye. Cabría añadir aquí que esta clase de "realidad" la construimos todos nosotros cada día. Que lo que "habita" en nosotros, tiene también su morada en el exterior. O dicho de otro modo: que el mundo de la vida no es otra cosa que el reflejo de mi interior. (Y ahora póngase "teatro" donde dice "mundo" -o mundo..., donde Artaud ponía teatro-, y tal vez comprendamos ese declive del que hablaba Artaud) .



Luz, por el día.
De noche, oscuridad.
Eso es todo...




JL.Vicent

[Santiago Larreta Irisarri]

No se si estar de acuerdo con el señor Artaud pues mi manifiesta ignorancia tambien llega ese campo que señala.
Del resto pienso que es un alarde de erudición que tampoco sabría desdecir ,ni era mi intención, pero lo que me pregunto es ;¿ es ésto un haibun ( por muy zuihitsu (?) que sea?)
Un saludo respetuoso

Santiago

[JL.Vicent]

A parte de señalar que es un "experimento", ya contesté a esa pregunta en otro lugar



Salud :wink:

[Jorge Moreno Bulbarela]

Esto hace reflexionar a los reflexivos: el teatro de la vida, la realidad cotidiana, lo que se puede decir y aquello que sólo se puede sugerir. Después de la prosa discursiva, un haiku que, a manera de un lienzo húmedo, borra el pizarrón y deja restos de tiza y luminosidades.

Jorge