El águila del cortafuegos

[Juan Carlos Moreno]

Salgo del garaje en mi coche para recoger a mi anciano padre. Hace una mañana fresca de otoño, todavía está oscuro aunque comienzan a despuntar las primeras luces del alba.

Tomamos la autovía, dirección Madrid, el sol asoma por la sierra de Chinchilla, entre pequeñas nieblas. No llevo la radio puesta para oir la voz de mi amado acompañante, que tiene, como yo, la esperanza de que hoy sea nuestro día y que podamos llenar el cesto de mimbre con esos níscalos anaranjados, frutos del otoño

Muy pronto nos desviamos, justo a la altura de una gran encina, rodeada de cardos seteros. Circulamos unos breves minutos por el camino bacheado hasta llegar a un lugar, conocido por mi padre, un gran cortafuegos que separa a dos grandes masas boscosas de pinos.

Nada más bajar del coche cogemos unas ramas de pino sin hojas , para ayudarnos en la búsqueda de los hongos.
Comenzamos a caminar, buceando entre el follaje, pisando diversos tonos de musgo, lleno de rocío.

Por todas partes hay hongos blancos, marrones; pero no comestibles. Seguimos, en paralelo al cortafuegos, que queda a la izquierda, el frío es intenso todavía; pero comienzan a cantar algunas aves del bosque.
Aunque levantamos ramas de pinos caídas, no encontramos níscalos. Hay un silencio penetrante y ese olor a humedad y romero… Bajo los grandes pinos hay tomillos, pequeñas encinas.
Casi no llega la luz de sol hasta el suelo lleno de verdes….

Crujir de ramas-
El musgo empapado
de rocío


De repente, comenzamos a escuchar unos intensos, pero lejanos chillidos, que se acercan, lentamente. Nos miramos…., no parecen ser de un halcón, tiene que ser un ave más grande, esos chillidos nos tienen paralizados de curiosidad. Entre chillido y chillido pausas de pocos segundos...

En el cortafuegos
resuenan los chillidos
del águila

Aparece volando en el cielo, majestuosa, una gran águila, que, atraviesa el cortafuegos perpendicularmente; poco a poco se pierde en el cielo del bosque donde nos encontramos. Por unos segundos quedamos absortos, empequeñecidos , formando parte del paisaje, como si fuéramos hongos

[Juan Carlos Moreno]

dedicado a mi padre....

[Marya Jesús]

Me ha encantado J.Carlos, los haikus son muy buenos. El cierre genial, enhorabuena amigo. Muchos besos. :wink:

[Antonio]

Un haibun de la tierra, un haibun de algo tan nuestro como es coger "guíscanos" (en manchego albaceteño, "guijcanos"), vamos los "níscalos" en el que unes tu amor por la naturaleza y por tu padre. Bonito.

Un abrazo. :wink:

[Juan Carlos Moreno]

Me alegra mucho leerte por aquí, por mi haibun

y me encanta que valores de esa manera mi vivencia

Muchas gracias por el apoyo

Muchos besos :wink:

[Juan Carlos Moreno]

Antonio:

Justo, qué bien pronuncias guíjcanos...je je . Sí es una especie de homenaje a la tierra y a una persona muy apegada a ella, mi padre.

Un Abrazo-ke
:wink:
Juan Carlos

[Jorge Moreno Bulbarela]

Bellos paisajes, Juanca. Oye, ¿los níscalos serán como los nísperos? Y el cortafuegos ¿es más o menos una especie de tramo desyerbado para que no se propague el fuego en caso de haberlo? Por acá es muy rudimentaria la forma de "cuidar" los bosques.

Un apretón de manos,
Jorge

[Claudia Bakún]

Querido Juanca: este relato me ha gustado mucho...es un hermoso homenaje a tu padre, y además una bella historia, llena de aromas y climas...Y sobre todo el final me parece excelente "Por unos segundos quedamos absortos, empequeñecidos , formando parte del paisaje, como si fuéramos hongos", ante el vuelo del águila.
Un abrazote

[Juan Carlos Moreno]

Jor, gracias por comentar....

Los níscalos son unos hongos anaranjados, muy apreciados. Sólo crecen en otoño y si ha llovido un poco antes, al final del verano. Crecen en los pinares más cerrados, y su olor es especial. Está muy bueno asado con ajo y perejil y una pizca de sal ó en arroz; pues suelta una sustancia anaranjada que le da mucha consistencia al caldo y está buenísimo.
Además a mi, particularmente, el níscalo, me trae muchos recuerdos y aromas de mi niñez.

El cortafuegos es un tramo amplio de bosque talado y cuidado para evitar la propagación del fuego, en caso de incendio. En concreto ese cortafuegos estaba lleno de guijarros, piedras redondeadas blancas, sólo un poco manchadas de esa tierra roja y fértil que hay en los pinares.

Un Abrazo Jor :wink:

[Juan Carlos Moreno]

Clau:
Me alegro, sinceramente, de que te guste este haibun. Reconozco que mi primero, escrito en la semana santa y éste (mi más reciente) son los dos que me dejan más satisfecho. Lo vuelvo a leer y revivo lo que sentí hace una semana en el monte, en el campo, en el pinar, con mi padre, con ese águila, el musgo, el romero....

Un Abrazo grandísimo

gracias por comentar...
y un beso. Buen inicio del finde
:wink: